IU, La participación en su ADN

IU, La participación en su ADN

«Nunca dudes que un pequeño grupo de ciudadanos comprometidos puede cambiar el mundo. De hecho, es lo único que lo ha logrado» – Margaret Mead, madre de la Antropología moderna

Esta semana nos acercamos a conocer la propuesta de Izquierda Unida para las elecciones municipales, y lo hacemos a través de la candidata a la alcaldía de Alhendín (municipio del cinturón de Granada), Victoria García Valenzuela, Vicky para los “muy allegados”. Nació en tierras del Nervión, pero es granadina, porque así lo eligió. Administrativa, cuarenta años, aguerrida, inquieta, y con una idea fija en su cabeza, presente durante toda la conversación, y a la que recurre una y otra vez, de forma más o menos consciente, la “Justicia Social”.

Victoria llega a Izquierda Unida, tras su paso por SOS-Racismo Granada, lo que la llevó a participar en el Foro Social, dónde conoció a Manuel Morales, Delegado en Granada, de Turismo Comercio y Fomento en el anterior gobierno de la Junta de Andalucía, y que por aquellos entonces, era un “joven” concejal del Ayuntamiento de Granada. Victoria reconoce que este encuentro fue muy impactante para ella y que el discurso de “Manolo la enamoró”. Finalmente Morales la fichó, y de esta manera entra en Izquierda Unida en 2007. Hasta ese momento había sido votante intermitente de IU, pero tanto el discurso de Morales, como el ambiente del partido en Granada, la terminó enganchando, llegándole sobre todo la honradez que vio en esta formación. No quiere hablar por todo su partido, sólo por la parte que ella conoce, por Granada, dónde pese a los años pasados, a Victoria le sigue llamando la atención no sólo la honradez, sino el altruismo de sus compañeros y compañeras, que “no buscan para nada ningún beneficio propio”. Gente que pone su trabajo, a cambio de nada, sólo por principios.

Victoria considera que si tiene que resumir lo que identifica a IU, por encima de cualquier otra cosa, sería la defensa de los Derechos Humanos (haciendo especial hincapié en la justicia social y la igualdad), la coherencia y la defensa de lo público. Y a la hora de distinguir a su formación del resto que concurren a las próximas municipales, lo tiene clarísimo, la gran diferencia es LA PARTICIPACIÓN. Un ejemplo clarísimo de hasta qué punto las decisiones de IU se toman sobre la base de que todo el mundo puede participar, lo supone el que para entrar a formar parte del gobierno andaluz, se hiciera un referéndum entre las bases para que tomaran la decisión de si hacerlo, o no. Como anécdota, se refiere a la primera asamblea provincial a la que asistió, en la que preguntó inocentemente si ella podía preguntar lo que quisiera, y decir lo que quisiera, para gran sorpresa de sus compañeros y compañeras, que poco menos le respondieron que de qué clase de campo de concentración venía. Para Victoria que todo el mundo pueda participar, con participación real, no ficticia, es una característica que define a su partido, como a ningún otro. Para ella sólo IU realmente es una formación en la que todo el mundo puede participar.

Todo el mundo es consciente que PODEMOS se ha nutrido de muchos militantes, simpatizantes, votantes, etc., de IU. Para Victoria las diferencias reales entre su partido y el partido que dirige Pablo Iglesias, radican en primer lugar, en cuanto al sistema de participación interna, que es PODEMOS, es una cosa como muy abierta, pero a la postre menos real. Y a nivel ideológico, que es dónde están las diferencias reales, es dónde está el quid de la cuestión. IU es un partido de izquierdas, con un posicionamiento claro ante todos los temas, mientras que PODEMOS, aunque parezca lo contrario, no tiene un planteamiento de izquierdas, e ideológicamente no se ha querido posicionar en los temas realmente importantes. Antes de las europeas, sí que estaban a la izquierda de IU, pero tras las elecciones, cuando ven que su caladero de votos puede ser mucho más amplio, en ese momento empiezan a cambiar el discurso, porque saltan por encima de IU, para pelear el voto al PSOE, e incluso al PP. “Ellos no tienen un planteamiento, ellos son la gente, ellos no tienen, ni defienden intereses de clase, ni unos principios ideológicos, ahora mismo no los tienen”. Para Victoria el día de la abdicación de Juan Carlos I, cuando todos los partidos de izquierda reales salieron a pedir un referéndum y PODEMOS en ese momento en el que había que retratarse, se desmarcó.

Las clave real del programa electoral general de IU para las próximas elecciones municipales radica en el convencimiento de que se terminó la política antigua, y que por ello se necesita gente diferente, que vea la política de otra manera y que quiera trabajar de otra manera, distanciándose del comportamiento rancio que hasta ahora existe. La política municipal se tiene que basar en la necesidad de generar alianzas y estas alianzas con quien realmente se tienen que hacer es con la ciudadanía, con los vecinos. Se acabó la política consumo, dónde la gente no quería participar, sólo que le resolvieran sus problemas. Ahora hay que enseñar y obligar a la ciudadanía a que participen, para lo que hay que generar los mecanismos necesarios para que esto sea posible, para que de verdad sea una realidad. Para Victoria ya hay municipios en los que están funcionando diversas modalidades, por lo que hay que ir a un modelo en el que las decisiones se consensuen con los vecinos, pero de una manera real. En los municipios pequeños es más fácil, pero en los más grandes se puede hacer a través de las juntas de distrito que tienen que ser auténticas plataformas de participación ciudadana activa. Es consciente que esto también requiere de un importante grado de concienciación, de información, de transparencia, y hasta de formación de la propia ciudadanía. Un proceso de educación en democracia, para que asuman su papel y lo ejerzan.

“Lo obvio acaba siendo algo excepcional”

“Lo obvio acaba siendo algo excepcional”

“No existe nada en el mundo más poderoso que una idea a la que le ha llegado su tiempo” – Víctor Hugo.

Podríamos coger los programas electorales de los diferentes partidos, y contar qué es lo que propone cada una de las fuerzas políticas, al menos las de mayor nivel de representación, para los próximos comicios municipales. Podríamos hacer un análisis muy concienzudo y politológico intentado hacer algún descubrimiento brillante, y por supuesto que sería más interesante. Pero en la filosofía del Grial, está el basarse en experiencias, en contar desde lo que se ha vivido, desde lo que se ha sentido, o desde lo que se ha hecho, por ello, la opción que hemos tomado, es hablar de las principales opciones que los ciudadanos tenemos a la hora de elegir nuestros próximos ayuntamientos, desde esta perspectiva, la de hablar de lo vivido. Y cómo no pertenecemos a ninguna formación política, hemos creído que la mejor manera era contarlo desde la experiencia de aquellos que sí lo están viviendo, que sí lo están haciendo, aunque necesariamente no tienen porqué ser primeros espadas. Esta semana comenzamos esta sección con la Experiencia Ciudadanos de Luis Miguel Rodríguez Garzón. Granadino, periodista de “los de antes” que ha estado 40 años en IDEAL, y que ahora en la tercera fase de su vida, ahora que ya no tiene que bregar en las guerras de una redacción, se ha ilusionado con un proyecto que se llama “Ciudadanos”. Él mismo reconoce que para una vez que se interesa por la política “va y acierta”. Él no tenía ninguna “necesidad”, más allá de la de querer que las cosas cambien, que España cambie. Cierra la lista a las municipales en Granada Capital.

Ciudadanos está siendo un fenómeno, y eso a estas alturas es algo en lo que expertos y no tan expertos estamos de acuerdo. Pero ¿qué tiene este partido “que a tanta gente le mola”? Luis Miguel, no lo duda. Es un partido que nace de la misma ciudadanía, que surge como un movimiento ciudadano, una plataforma ciudadana en la que sencillamente se cobijan personas de diferente edad, formación, posición social, religión, profesión, etc. Es la respuesta para una parte de la sociedad, que se sentía errante en el voto, que votaba más por estar en contra de… que por estar a favor de… Y sobre todo con algo en común, gente que quiere hacer, gente que ya no quiere seguir siendo espectador y “protestador pasivo”. Gente muy diferente que llega a la misma conclusión “algo habrá que hacer”. Además, en el caso de Luis Miguel, que sentía mucha simpatía por el líder a nivel nacional, por Albert Rivera, su encuentro lleno de “feeling” con Luis Salvador, el que es candidato a la alcaldía de Granada, hizo que no lo dudara. Entra en “una casa en la que existe el pleno convencimiento de que cualquiera puede hacer” independientemente de lo que sea, de lo que tenga. El primer reto al que tuvieron que enfrentarse fueron las elecciones europeas, que suponen el principio del nuevo tiempo.

Para Luis Miguel, las tres palabras que definen lo que él siente que es Ciudadanos son: Honestidad; Futuro; e Ilusión. Para nuestro protagonista, es un partido honesto, que tiene futuro para sí mismo y para España, y además tiene capacidad para ilusionar, como demuestra la cantidad de gente que está encontrando su sitio en esta formación. Considera que a diferencia de PODEMOS que ha aglutinado a gente con muy diferentes necesidades, planteamientos y puntos de vista, mientras que eso no ocurre con Ciudadanos. Para él esto es lo que explica las dinámicas encontradas que ahora mismo, en lo que a intención de voto se refiere, están experimentando ambas “revoluciones”.

En cuanto al tan traído y llevado tema de los posibles pactos, ya que el escenario bipartidista todos intuimos que va a desaparecer, Luis Miguel no titubea, y de alguna manera retoma el famoso “programa, programa, programa” de Julio Anguita. Están dispuestos a pactar con cualquiera, porque el tema no es con quién pactar, sino sobre qué pactar. Siempre que los pactos sirvan para mejorar la situación y para luchar contra cuestiones como la corrupción, o el paro, Ciudadanos, estará dispuesto, porque por delante de las siglas, están las personas.

Ciudadanos estatutariamente es un partido que se define de izquierdas, aunque lo cierto es que el eje izquierda – derecha, para este partido es sencillamente una concepción añeja, lo importante es hacer cosas, independientemente de las ideologías, que hoy además se parecen mucho.

Para Luis Miguel Ciudadanos supone el “triunfo de la razón”, en el sentido de que sólo propone cosas lógicas, cosas no extraordinarias, simplemente cosas que se pueden hacer. Aunque para él lo que lo hace sentirse más orgulloso de formar parte de este partido, en el que está dispuesto a hacer lo que le manden, es saber que el día de mañana, cuando sea una formación mucho más importante de lo que es ahora, su hijo y sus nietos puedan decir, mi padre, mi abuelo, estuvo en los comienzos.

Trasmite ilusión ver cómo una persona que podría dedicarse a viajar y leer (dos de sus pasiones) o simplemente a la vida contemplativa, se ha volcado en un proyecto político nuevo, al que ha llegado como un adolescente que se va de fiesta por primera vez. Independientemente de la ideología o del partido en el que se milite, creo que todos queremos que aquellas personas que aspiran a gobernarnos, sientan esa pasión por lo que hacen.

Gracias, Luismi.

Sorpresas en la intención de voto

Sorpresas en la intención de voto

“Las elecciones, a veces, son la venganza del ciudadano. La papeleta es un puñal de papel.” – David Lloyd George

Una vez más nos apoyamos en los amigos de www.politicalmarkets.com que recordemos que son una página que ofrece regularmente una media de encuestas electorales en España, utilizando como base los sondeos de las más importantes consultoras a nivel nacional y mostrando de esta manera, cuál es la tendencia en la estimación de voto, para todos los niveles territoriales, aunque hoy repasamos la tendencia de voto de cara a las generales. Los resultados de abril tienen especial interés, sobre todo porque aparecen después de las elecciones andaluzas de 22 de marzo que recordemos fueron la primera gran prueba de este apasionante año electoral que estamos viviendo. Los datos anteriores se refieren al 15 de marzo, y los que comentamos son del 15 de abril.

Lo primero que llama la atención es que sólo bajan dos fuerzas políticas en este mes. Así UPyD que se haya en pleno proceso de “renovación/reinvención” tras los resultados de las elecciones autonómicas en Andalucía, ve reducida la intención de voto en un 1,31%. Actualmente su estimación de voto está en el 2,07%, muy lejos de su mejor momento desde las pasadas elecciones de junio de 2014, en las que llegó al 6,2%. Este dato es el peor para la formación magenta desde la cita electoral europea, y además demuestra que si no cambian las cosas, la formación política que dirige Rosa Díez, está en pleno proceso de caída libre.

La otra formación que también vive un momento complicado es PODEMOS. El partido “fenómeno” que ha modificado las estructuras en nuestro país, llegó a tener un 26,56% de intención de voto, en su mejor momento. Ahora mismo y tras sus primeros contactos con “el poder real”, fuera de los “140 caracteres de Twitter”, el partido que encabeza Pablo Iglesias, ahora mismo cuenta con el favor del 18,30% del electorado, de cara a las Elecciones Generales, lo que supone un descenso nada más y nada menos que del 5,62% en el último mes. Varias podrían ser las cuestiones que han incidido en esta bajada pronunciadísima de PODEMOS. En primer lugar el efecto que pueda estar teniendo el mensaje y la imagen de algunos de sus líderes más reconocidos, como pueda ser Monedero. En segundo lugar, las elecciones andaluzas han supuesto tocar calle de verdad y lanzarse al ruedo político, ya sin red, y tal vez están pagando la inexistencia de una red organizativa estructurada y consolidada. Y en tercer lugar, la dilución de la marca PODEMOS, con otras como Ganemos, Ahora Podemos, etc., puede estar minando también la notoriedad de la marca general.

Los partidos “históricos”, es decir, PP, PSOE e IU, presentan leves mejorías, tras varios meses presentando datos negativos. El partido en el gobierno, el PP, sube ligeramente (0,02%), situándose en casi el 26% de intención de voto (25,85%). Recordemos que en su peor momento desde las pasadas elecciones europeas ha llegado a tener una intención de voto del 24,9%, aunque aún lejos de sus mejores datos, desde junio del 2014 cuando casi el 32% de los españoles estaban dispuestos a votar al partido que dirige Rajoy. Es muy probable que los mejores datos económicos que empiezan a aparecer, hayan beneficiado a la fuerza política de la gaviota, aunque la losa de la corrupción que tiene encima necesitaría casi de un milagro, para ser compensada con buenos números.

El PSOE, es el que más ha crecido, dentro de esta categoría de históricos, actualmente algo más del 22% de los españoles le votarían, lo que hace que haya mejorado ligeramente con respecto al mes anterior en un 1,52%, acercándose a las mejores cifras que ha presentado desde la contienda electoral europea que fueron del 24,28%.

IU, parece que empieza a recoger, tras las pérdidas importantes que tuvo en favor de PODEMOS, tanto de votantes, como de militantes e incluso dirigentes. El partido de Garzón, ahora mismo cuenta con el favor del 4,70% de los españoles, aunque recordemos que en este último año, llegó a tener un 6,55% de intención de voto.

Hemos dejado para el último, el que sin lugar a dudas está siendo el partido revelación y el que mayor crecimiento está experimentando a todos los niveles. Ciudadanos está en la cresta de la ola, y en este mes ha subido en intención de voto más de un 5%, situándose ahora mismo en el 15,08% (a tres puntos de PODEMOS), y habiendo crecido en intención de voto, desde las elecciones de junio casi un 12%.

El naranja está de moda.

El naranja está de moda.

La democracia es el único sistema capaz de reflejar la premisa humanista de equilibrio o balance. La clave de su secreto es la participación de los ciudadanos. – John Ralston Saul

Sea como fuere, y tras los resultados de las elecciones andaluzas, si hay un color que está de moda en este país, es sin lugar a dudas el naranja. El partido de Albert Rivera, Ciudadanos, se está convirtiendo en un ciclón que tras “el sorpresón” andaluz, arrasa en las encuestas que se están haciendo en todas las comunidades autónomas. Entendamos el término “arrasa”. En ningún sitio se la da como la primera fuerza política. El rojo y el azul, siguen siendo los colores que se imponen en las diferentes demoscopias, e incluso el morado, en muchos sitios sigue siendo el claro tercero en discordia, pero lo que es innegable es la fuerza huracanada del naranja. Ciudadanos es en este momento considerado por los expertos, el único partido político que está experimentando un crecimiento tanto en lo que se refiere a intención de voto, como a militantes. Además a esto se añade que su líder, es ahora mismo el mejor valorado. De hecho este barcelonés de ascendencia materna malagueña, es el único que crece en valoración y llegando casi al aprobado, con una puntuación de 4,96. Estaremos de acuerdo en que la mayoría de los profes, dirían que eso es superar el examen. Rivera está con un punto más que el siguiente mejor valorado que es Pedro Sánchez, actualmente con 3,92, y bajando mes a mes. De hecho el único que ha subido, según los últimos datos ha sido el cabeza de Ciudadanos.

Estos son los datos objetivos, pero ¿dónde está el secreto de los “naranjitos”? Ciudadanos ha conseguido llegar a la ciudadanía, con el mensaje de que son el “Cambio Sensato”, como reza en su eslogan. La formación Podemos, ha sigo el buque insignia que ha roto los esquemas políticos de una sociedad que aún piensa en su gran mayoría en clave de transición, y que se siente acomplejada, ante la idea de “admitir” nuevos actores en el juego de la política. Pero Podemos, tiene una imagen que para una sociedad que aún no se siente madura políticamente hablando en muchos aspectos, es demasiado radical. Además el desembarco de muchos dirigentes y militantes de fuerzas de izquierda, extrema izquierda, movimientos asamblearios, etc., ha hecho que algunos de los que de entrada sentían cierta simpatía ante este nuevo aire fresco, haciendo política con las armas del Siglo XXI, como Redes Sociales, etc., hayan querido buscar por otros lares, y ahí es dónde ha aparecido la imagen prudente, sensata, centrada y alejada de todo tipo de estridencias, del “chico bueno”, y de sus seguidores.

Rivera representa a una generación que ni hizo, ni sufrió la transición. Aparece como un hombre nuevo que no está contaminado de lo rancio que tiene el rojo y el azul. Y además el color que eligió para su formación política también es una cuestión muy importante y a tener en cuenta. El naranja es un color que se asocia al Éxito, a la Creatividad, a la Alegría, a la Vitalidad. Desde el punto de vista del marketing, la elección de esta cromatía es fundamental. Sin entrar en análisis profundos, pero teniendo muy cerca el punto de vista del neuromarketing, en la elección de un partido político, al igual que en la de un producto, un detergente, por ejemplo, no sólo interviene la parte racional, de hecho muchas veces es la que tiene menos peso en la toma de la decisión. La parte emocional tiene mucho que decir, y ahí el color naranja aporta, además, a esta formación política otro plus. Este color trasmite energía combinada con diversión, y además es el color de las personas que asumen riesgos y que son extrovertidas y desinhibidas. Significa aventura, optimismo, confianza en nosotros mismos, sociabilidad y salud, sugiriendo además, placer, alegría, paciencia, generosidad y ambición. Es un color que por otro lado conecta tanto con hombres como con mujeres. Así que como decíamos, asociar estos valores de forma espontánea y natural en nuestra mente, a la imagen de un político joven, que llega sin mochila, que además es atractivo y que se muestra sensato en su discurso, es sin lugar a dudas, un componente fundamental en la marca Ciudadanos, de la que seguramente, vamos a seguir hablando mucho.

Los resultados del 22M en Andalucía ¿sorpresa?

Los resultados del 22M en Andalucía ¿sorpresa?

resultados elecciones

“En política, lo importante no es tener razón, sino que se la den a uno” – Konrad Adenauer

Han pasado las elecciones andaluzas, el primer gran round al que se enfrentaban las diferentes fuerzas políticas en este año electoral, por antonomasia. Las encuestas pasaban a un segundo plano, y era la ciudadanía quién realmente se manifestaba, y no bajo el anonimato de dar una opinión por teléfono, o en la calle, a personas desconocidas. Era el momento de ser consecuente, de ir a los colegios electorales, de coger una papeleta, pensando en la persona (marca personal) que se prefería para dirigir los designios de la autonomía con mayor nivel de paro, y con unos índices económicos de los más bajos. O si no en la persona, en el partido (marca política) que entendíamos que mejor podría defender los derechos de andaluces y andaluzas y sobre todo, hacer a esta Comunidad Autónoma dar el definitivo salto al siglo XXI. Mucha era la expectación, muchas las elucubraciones que se habían hecho, pero ahora ya sí que tenemos resultados. Y la pregunta que cabe hacerse después del 22M andaluz, es sin lugar a dudas, ¿qué nos ha enseñado Andalucía?

Varias eran las cuestiones que tenía que desvelar este proceso electoral. La primera de ellas, era conocer el destino del bipartidismo en España, ¿ha muerto o sigue vivo? Viendo los resultados, y viendo cómo han entrado nuevas fuerzas políticas en el Parlamento Andaluz podríamos pensar que se ha vencido al “rancio bipartidismo español PP-PSOE”, pero pensar esto hoy por hoy, sería engañarnos. Y ¿por qué? Sencillamente porque los número hablan por sí solos. ¡Cómo podemos decir que el bipartidismo se ha roto, cuando estas dos fuerzas políticas han sido votadas por algo más del 62 por ciento del total de andaluces y andaluzas? El bipartidismo en la comunidad autónoma blanquiverde no se ha roto, sencillamente va a tener un parlamento más acorde a la imagen de los parlamentos, sobre todo de las comunidades históricas (entre las que se cuenta) y de las de mayor tamaño, en el que hay varias fuerzas políticas con representación, aunque en el caso de Andalucía, ninguna sea autonómica. Es cierto que el bipartidismo ha retrocedido, pero retroceder es una cuestión muy diferente a desaparecer. Nuevos procesos electorales tendrán que ir mostrándonos si realmente es tendencia el retroceso, o se convierte en el fruto de un momento histórico (político, económico y social) determinado.

La segunda cuestión importante a analizar es sin lugar a dudas ¿quién ha ganado las elecciones? Evidentemente, si nos vamos a los datos, las ha ganado el PSOE, pero la pregunta tiene un calado mayor. Realmente qué lectura se puede hacer de estos resultados. En primer lugar vayamos a los vencedores. Susana Díaz es la clara vencedora de las elecciones, y hablo de ella con nombre y apellidos, porque aunque respaldada por la marca política (PSOE), que tiene el peso que tiene en Andalucía, ha conseguido imponer su marca personal, y pasar de advenediza a presidenta electa. El trabajo que ha desarrollado esta mujer, para ganar las elecciones en un momento de marejada como el que se está viviendo, nos muestra mucho de los que la “politología” y el mundo de los asesores políticos puede hacer. Sin entrar en ningún tipo de valoraciones, esta mujer, que además es mujer, lo que nos debe hacer pensar que la cuestión de género, al fin se ha superado en Andalucía, ha conseguido hacer que andaluces y andaluzas, se olviden de los ERE´s, de Mercasevilla, de los escándalos de la formación, y que vuelvan a confiar en ella, y en su fuerza política, que además, no olvidemos, lleva dirigiendo el destino de Andalucía desde 1981. Jamás ha habido un cambio de gobierno. Tan sólo en algunas legislaturas (dos concretamente) ha necesitado coaliciones para gobernar, primero fue el Partido Andalucista, que desapareció prácticamente después de esta aventura conjunta, y en esta última legislatura IU, que parece haber pagado caro también este matrimonio de conveniencia.

Pero además del PSOE y Susana Díaz, ha habido otro claro vencedor en Andalucía, y este aunque pareciera que fuera PODEMOS, no, no lo es. En este caso el otro ganador es Ciudadanos, y curiosamente Albert Ribera, aunque no fuera candidato en Andalucía, ha visto cómo su figura salía reforzada. El partido que lidera este joven catalán, ha obtenido finalmente 9 parlamentarios, superando las expectativas de prácticamente todas las encuestas y convirtiéndose en una opción seria a tener en cuenta en los próximos procesos electorales. El naranja parece que ha conseguido finalmente hacerse un importante hueco en el panorama político español, saliendo de su bastión catalán.

Y si nos vamos ahora al otro extremo, los perdedores claramente han sido PP e IU. El descalabro electoral de los populares ha sido monumental, pareciendo que las nuevas fuerzas políticas emergentes casi que se hayan nutrido para conseguir su respaldo de aquellos que en otro momento votaron a este partido que representa al centro derecha español. Los populares han gestionado mal tanto la marca política (el desgaste de las políticas nacionales de austeridad y ajuste desarrolladas por el gobierno de Rajoy, que han incidido especialmente en Andalucía) así como la marca personal, Juanma Moreno, (un candidato muy desconocido, sin presencia mediática importante, y sobre todo con un nivel de notoriedad bajísimo) no han podido con la marca Susana Díaz, omnipresente en el último año sobre todo. El PP que fue el ganador de las pasadas elecciones, en 2012, ha perdido casi el 14 por ciento del electorado, lo que le ha supuesto perder 17 parlamentarios. Toque de atención muy serio, por mucho que desde Génova se quiera hacer ver que no es para nada, extrapolable el proceso electoral andaluz a los próximos que tenemos por delante. Izquierda Unida, ha sido el otro gran perdedor. Ha tenido como enemigos por un lado a PODEMOS, y es que no olvidemos que esta fuerza política se ha nutrido de muchos integrantes de esta formación; y por otro lado, su alianza de gobierno con el PSOE, del que fue “expulsado” para convocar así este proceso electoral. El tira y afloja final con el PSOE ha tenido consecuencias muy negativas para esta formación política, a la que parece que sus electores no le han perdonado el que no hayan “hecho nada más ante los escándalos de corrupción”. UPyD también es otro perdedor. Esta formación política no ha pedido parlamentarios, porque no los tenía. Ha perdido el 40 por ciento de sus votos, y sobre todo, se ha diluido en un momento que les era propicio, ya que ha sido la primera vez que “otras opciones” han entrado en el parlamento andaluz. No han sabido conectar con la ciudadanía en el momento en el que probablemente el caldo de cultivo estaba ahí. También el rosa magenta, tendrá que analizar muy mucho lo que ha pasado en Andalucía y tomar nota ante próximos procesos electorales.

Finalmente está PODEMOS. Está claro que los resultados de esta formación política son un éxito, ya que se consolida como tercera fuerza en Andalucía, y consigue en su primera comparecencia autonómica convencer a casi el 15 por ciento del electorado. Pero no es menos cierto que todos los augurios en forma de sondeos, eran mucho más benévolos con los “morados”.

Fuere como fuere, cada marca debe de sacar sus propias conclusiones y sobre todo, si se quiere mejorar, hacerlo desde un punto de la autocrítica y no desde la autocomplacencia o queriendo encontrar la “culpabilidad” fuera.