“Las elecciones, a veces, son la venganza del ciudadano. La papeleta es un puñal de papel.” – David Lloyd George
Han pasado ya diez días desde que la ciudadanía eligiéramos a nuestros nuevos representantes municipales. Las urnas en general, nos dejaron un panorama hasta ahora desconocido en nuestro país, ya que las mayorías absolutas, aunque no hayan desaparecido del todo, se han quedado reducidas a la mínima expresión, sobre todo en poblaciones de más de 20.000 habitantes. Esta situación hace que como se preveía comience una nueva etapa que debe de estar protagonizada por una nueva forma de hacer política, en la que irremediablemente los pactos son los que tienen que marcar las hojas de ruta a seguir, y sobre todo, son los que finalmente van a decidir quiénes van a ser los gobernantes y por supuesto quiénes van a ocupar las alcaldías. Hasta ahora hay una gran incertidumbre al respecto de quién finalmente será el alcalde o la alcaldesa en la gran mayoría de las capitales de provincia. Los nuevos actores, lógicamente se están dejando querer y aún no se han manifestado claramente en muchos casos. En lo que sin lugar a dudas sí que hemos de estar de acuerdo, es en que es un nuevo principio, y que por supuesto supone un cambio radical con respecto a lo que hasta ahora, mayoritariamente ha sido la política municipal.
En las semanas previas al 24 de mayo, por nuestro blog han pasado representantes de la mayoría de las fuerzas políticas, y muchos de ellos ahora son protagonistas absolutos del proceso. Aunque vamos a referirnos al caso de Granada, prácticamente las conclusiones y lo sucedido se puede trasladar a todas las capitales andaluzas y a gran parte de todas las de España, ya que aunque se hable a nivel municipal, en cierta manera, se trabaja en “modo consigna nacional”, porque no olvidemos que las generales que serán probablemente en noviembre, están en el punto de mira de todas las fuerzas políticas, por lo que las elecciones que hagan ahora, y a qué “compañeros de cama” se elija, será determinante a la hora de presentarse con mayor o menor credibilidad al nuevo proceso electoral.
Uno de los partidos “nuevos” que por primera vez competían a nivel municipal es VOX. No se presentaba de forma general en todos los municipios, ni tan siquiera en la mayoría, y sus resultados han sido bastante exiguos. En el caso de Granada, Ignacio Nogueras, el candidato a la alcaldía de la capital nazarí, tras conocerse los resultados nos decía que “el caos se ha instalado”. Para Nogueras, es necesario respetar los programas electorales y las ideas, y según él, esto es incompatible con los pactos. Considera que “la llave la tiene Ciudadanos, y este partido es el que al final va a decidir en muchos sitios, como Granada, quién gobierna o quién no”. Nogueras teme que este nuevo panorama pueda terminar en cuatro años perdidos para la mayoría de los municipios. También quiso aprovechar este espacio para agradecer a los cerca de 1000 votantes que han confiado en su opción en Granada capital.
UPyD, ha sido probablemente el gran damnificado en este proceso electoral, ya que a nivel general, ha perdido aproximadamente el 40% de sus votos. Mayte Olalla, que hasta el próximo día 13 sigue siendo concejala en funciones en el Ayuntamiento de la capital granadina cree que “la baja participación ha sido un palo tremendo, y que todas las fuerzas políticas deben revisar sus actuaciones, porque esto significa que algo se está haciendo mal”. A partir de ahora “el escenario que se abre supondrá un gran reto para los ayuntamientos, y por supuesto para el de Granada”. Olalla sale del consistorio nazarí con la satisfacción del trabajo realizado, con la convicción de haber hecho todo lo posible, recordando que el presupuesto inicial para la campaña con el que contaban era de 339 euros (finalmente 3140 con las donaciones), lo que desde luego no les ha ayudado a tener una gran presencia mediática, como la que sí han disfrutado otras fuerzas políticas.
Otra “víctima” en estas elecciones ha sido Izquierda Unida. En Granada ha perdido la mitad de su representación, volviendo a tener sólo un concejal. Aunque mo todo han sido malos resultados para esta formación. Con nosotros estuvo Victoria … que recordemos era la candidata por Alhendín, y en sus caso los resultados han sido un auténtico éxito. Vicky ha conseguido entrar en el ayuntamiento de la localidad del cinturón de Granada y devolver a este municipio la presencia de IU, que desde los años noventa no había vuelto a estar, por lo que para esta sevillana, granadina de adopción, ahora se abre una nueva etapa llena de ilusión y que afronta con muchas ganas. También quiso recordar que los resultados generales en la provincia han llevado a su formación a pasar de 4 alcaldías a 11 y a incrementar las concejalías, por lo que ahora IU debe centrarse en “responder a la gente que ha confiado en nosotros”.
Vamos Granada, formación en la que estaban PODEMOS y EQUO, aunque realmente es un partido ciudadanista, también concurría en estos comicios por primera vez. Esta formación ha conseguido 3 concejalías, y Romu Benítez, que formaba parte de esta lista, y que estuvo con nosotros para presentarnos su programa, hacía también una valoración al respecto, considerando que han cumplido sus principales objetivos, ya que según Benítez “llegábamos a estas elecciones con el objetivo de romper la mayoría absoluta del Partido Popular, que duraba ya 12 años, y además buscando estar presentes en el consistorio para poder participar en la toma de decisiones y ambos objetivos se han cumplido, por lo que desde Vamos Granada, la valoración que hacemos de los resultados electorales es muy positiva”. Este partido, que tiene una forma muy diferente de entender cómo se deben de hacer las cosas, afronta también con mucha ilusión, la nueva etapa. Avisan de su intención de propiciar que no haya un nuevo gobierno de Pepe Torres, pero a la vez quieren dejar claro que no van a entrar a formar parte de un posible “gobierno de izquierdas”.
Uno de los grandes vencedores de estas elecciones, y además considerado “llave” en muchos de los municipios de nuestro país, y en muchos de los “emblemáticos”, es sin lugar a dudas Ciudadanos. Con nosotros estuvo Luis Miguel Rodríguez, y también nos recibió para valorar los resultados. En el caso concreto de Granada, existía un gran descontento con la campaña directa en contra del candidato, Luis Salvador, que había hecho el PP, por la que el propio alcalde en funciones, Pepe Torres, pidió la pasada semana disculpas públicas. Para Luismi esta campaña había restado votos a su formación y también al propio PP, propiciando que la participación fuera finalmente menor de la esperada. Para Rodoríguez lo más gratificante para su formación ha sido “que se ha acabado con el rodillo de la mayoría”. Aún no se puede avanzar cuál va a ser el signo del voto de esta “llave”, aunque lo que sí se nos asegura es que no va a formar parte de ningún gobierno, sino que van a trabajar para llevar la trasparencia al consistorio y para que cada decisión deba de ser consensuada. “Ciudadanos no va a dar un cheque en blanco a ninguna formación, a cambio de ningún asiento”.
El gran perdedor, de estas elecciones, sin lugar a dudas es el Partido Popular, que tras 12 años de gobierno municipal ha visto como perdía la mayoría absoluta, dejando en el camino además a cinco concejales con respecto a las elecciones anteriores. Nos sentábamos con Antonio Granados, -hasta ahora concejal de deportes, número 12 de la lista, y el primero de los integrantes de la candidatura del PP que finalmente no ha conseguido acta- quien hace una valoración autocrítica de los resultados obtenidos por su formación. Es consciente de que “los ciudadanos han hablado y han castigado a nivel nacional a su partido. No es un tema particular de Granada, sino generalizado, por lo que cree que “en la dirección nacional del Partido Popular hay que reflexionar, no siendo autocompasivo o autocomplaciente, sino que hay que oír a la ciudadanía y a lo que han querido trasmitir. Es necesario que los líderes se remanguen y tomen el pulso a lo que está pasando, tomando las decisiones que sean necesarias, y sobre todo oyendo lo que la ciudadanía ha dejado claro con estos comicios”. Granados también aprovechaba para agradecer a todas aquellas personas del mundo del deporte que en estos días se han puesto en contacto con él para agradecerle el trabajo desarrollado durante estos cuatro años.
Y finalmente, también hablábamos con Paco Cuenca, cabeza de lista de los socialistas granadinos, y que aspira a ser alcalde de Granada, liderando una coalición progresista que desbanque a la actual corporación. Cuenca, que ha mantenido los mismos concejales con los que partía, ocho, considera que Granada ha hablado, se ha manifestado y que la mayoría de los granadinos y granadinas quiere un cambio en la alcaldía, por lo que él se propone como esa alternativa, liderando un nuevo proyecto de ciudad, basado en consensos y sobre todo, en la creación de empleo y hasta el día 13 que se constituirán los nuevos ayuntamientos, va a seguir trabajando para que así sea.
Fuera como fuese, el sábado de la próxima semana, San Antonio de Padua, según el santoral, día 13 de junio, definitivamente las incógnitas quedarán desveladas. ¿Cuáles son vuestras apuestas?
«Nunca dudes que un pequeño grupo de ciudadanos comprometidos puede cambiar el mundo. De hecho, es lo único que lo ha logrado» – Margaret Mead, madre de la Antropología moderna
Esta semana nos acercamos a conocer la propuesta de Izquierda Unida para las elecciones municipales, y lo hacemos a través de la candidata a la alcaldía de Alhendín (municipio del cinturón de Granada), Victoria García Valenzuela, Vicky para los “muy allegados”. Nació en tierras del Nervión, pero es granadina, porque así lo eligió. Administrativa, cuarenta años, aguerrida, inquieta, y con una idea fija en su cabeza, presente durante toda la conversación, y a la que recurre una y otra vez, de forma más o menos consciente, la “Justicia Social”.
Victoria llega a Izquierda Unida, tras su paso por SOS-Racismo Granada, lo que la llevó a participar en el Foro Social, dónde conoció a Manuel Morales, Delegado en Granada, de Turismo Comercio y Fomento en el anterior gobierno de la Junta de Andalucía, y que por aquellos entonces, era un “joven” concejal del Ayuntamiento de Granada. Victoria reconoce que este encuentro fue muy impactante para ella y que el discurso de “Manolo la enamoró”. Finalmente Morales la fichó, y de esta manera entra en Izquierda Unida en 2007. Hasta ese momento había sido votante intermitente de IU, pero tanto el discurso de Morales, como el ambiente del partido en Granada, la terminó enganchando, llegándole sobre todo la honradez que vio en esta formación. No quiere hablar por todo su partido, sólo por la parte que ella conoce, por Granada, dónde pese a los años pasados, a Victoria le sigue llamando la atención no sólo la honradez, sino el altruismo de sus compañeros y compañeras, que “no buscan para nada ningún beneficio propio”. Gente que pone su trabajo, a cambio de nada, sólo por principios.
Victoria considera que si tiene que resumir lo que identifica a IU, por encima de cualquier otra cosa, sería la defensa de los Derechos Humanos (haciendo especial hincapié en la justicia social y la igualdad), la coherencia y la defensa de lo público. Y a la hora de distinguir a su formación del resto que concurren a las próximas municipales, lo tiene clarísimo, la gran diferencia es LA PARTICIPACIÓN. Un ejemplo clarísimo de hasta qué punto las decisiones de IU se toman sobre la base de que todo el mundo puede participar, lo supone el que para entrar a formar parte del gobierno andaluz, se hiciera un referéndum entre las bases para que tomaran la decisión de si hacerlo, o no. Como anécdota, se refiere a la primera asamblea provincial a la que asistió, en la que preguntó inocentemente si ella podía preguntar lo que quisiera, y decir lo que quisiera, para gran sorpresa de sus compañeros y compañeras, que poco menos le respondieron que de qué clase de campo de concentración venía. Para Victoria que todo el mundo pueda participar, con participación real, no ficticia, es una característica que define a su partido, como a ningún otro. Para ella sólo IU realmente es una formación en la que todo el mundo puede participar.
Todo el mundo es consciente que PODEMOS se ha nutrido de muchos militantes, simpatizantes, votantes, etc., de IU. Para Victoria las diferencias reales entre su partido y el partido que dirige Pablo Iglesias, radican en primer lugar, en cuanto al sistema de participación interna, que es PODEMOS, es una cosa como muy abierta, pero a la postre menos real. Y a nivel ideológico, que es dónde están las diferencias reales, es dónde está el quid de la cuestión. IU es un partido de izquierdas, con un posicionamiento claro ante todos los temas, mientras que PODEMOS, aunque parezca lo contrario, no tiene un planteamiento de izquierdas, e ideológicamente no se ha querido posicionar en los temas realmente importantes. Antes de las europeas, sí que estaban a la izquierda de IU, pero tras las elecciones, cuando ven que su caladero de votos puede ser mucho más amplio, en ese momento empiezan a cambiar el discurso, porque saltan por encima de IU, para pelear el voto al PSOE, e incluso al PP. “Ellos no tienen un planteamiento, ellos son la gente, ellos no tienen, ni defienden intereses de clase, ni unos principios ideológicos, ahora mismo no los tienen”. Para Victoria el día de la abdicación de Juan Carlos I, cuando todos los partidos de izquierda reales salieron a pedir un referéndum y PODEMOS en ese momento en el que había que retratarse, se desmarcó.
Las clave real del programa electoral general de IU para las próximas elecciones municipales radica en el convencimiento de que se terminó la política antigua, y que por ello se necesita gente diferente, que vea la política de otra manera y que quiera trabajar de otra manera, distanciándose del comportamiento rancio que hasta ahora existe. La política municipal se tiene que basar en la necesidad de generar alianzas y estas alianzas con quien realmente se tienen que hacer es con la ciudadanía, con los vecinos. Se acabó la política consumo, dónde la gente no quería participar, sólo que le resolvieran sus problemas. Ahora hay que enseñar y obligar a la ciudadanía a que participen, para lo que hay que generar los mecanismos necesarios para que esto sea posible, para que de verdad sea una realidad. Para Victoria ya hay municipios en los que están funcionando diversas modalidades, por lo que hay que ir a un modelo en el que las decisiones se consensuen con los vecinos, pero de una manera real. En los municipios pequeños es más fácil, pero en los más grandes se puede hacer a través de las juntas de distrito que tienen que ser auténticas plataformas de participación ciudadana activa. Es consciente que esto también requiere de un importante grado de concienciación, de información, de transparencia, y hasta de formación de la propia ciudadanía. Un proceso de educación en democracia, para que asuman su papel y lo ejerzan.
“Las elecciones, a veces, son la venganza del ciudadano. La papeleta es un puñal de papel.” – David Lloyd George
Una vez más nos apoyamos en los amigos de www.politicalmarkets.com que recordemos que son una página que ofrece regularmente una media de encuestas electorales en España, utilizando como base los sondeos de las más importantes consultoras a nivel nacional y mostrando de esta manera, cuál es la tendencia en la estimación de voto, para todos los niveles territoriales, aunque hoy repasamos la tendencia de voto de cara a las generales. Los resultados de abril tienen especial interés, sobre todo porque aparecen después de las elecciones andaluzas de 22 de marzo que recordemos fueron la primera gran prueba de este apasionante año electoral que estamos viviendo. Los datos anteriores se refieren al 15 de marzo, y los que comentamos son del 15 de abril.
Lo primero que llama la atención es que sólo bajan dos fuerzas políticas en este mes. Así UPyD que se haya en pleno proceso de “renovación/reinvención” tras los resultados de las elecciones autonómicas en Andalucía, ve reducida la intención de voto en un 1,31%. Actualmente su estimación de voto está en el 2,07%, muy lejos de su mejor momento desde las pasadas elecciones de junio de 2014, en las que llegó al 6,2%. Este dato es el peor para la formación magenta desde la cita electoral europea, y además demuestra que si no cambian las cosas, la formación política que dirige Rosa Díez, está en pleno proceso de caída libre.
La otra formación que también vive un momento complicado es PODEMOS. El partido “fenómeno” que ha modificado las estructuras en nuestro país, llegó a tener un 26,56% de intención de voto, en su mejor momento. Ahora mismo y tras sus primeros contactos con “el poder real”, fuera de los “140 caracteres de Twitter”, el partido que encabeza Pablo Iglesias, ahora mismo cuenta con el favor del 18,30% del electorado, de cara a las Elecciones Generales, lo que supone un descenso nada más y nada menos que del 5,62% en el último mes. Varias podrían ser las cuestiones que han incidido en esta bajada pronunciadísima de PODEMOS. En primer lugar el efecto que pueda estar teniendo el mensaje y la imagen de algunos de sus líderes más reconocidos, como pueda ser Monedero. En segundo lugar, las elecciones andaluzas han supuesto tocar calle de verdad y lanzarse al ruedo político, ya sin red, y tal vez están pagando la inexistencia de una red organizativa estructurada y consolidada. Y en tercer lugar, la dilución de la marca PODEMOS, con otras como Ganemos, Ahora Podemos, etc., puede estar minando también la notoriedad de la marca general.
Los partidos “históricos”, es decir, PP, PSOE e IU, presentan leves mejorías, tras varios meses presentando datos negativos. El partido en el gobierno, el PP, sube ligeramente (0,02%), situándose en casi el 26% de intención de voto (25,85%). Recordemos que en su peor momento desde las pasadas elecciones europeas ha llegado a tener una intención de voto del 24,9%, aunque aún lejos de sus mejores datos, desde junio del 2014 cuando casi el 32% de los españoles estaban dispuestos a votar al partido que dirige Rajoy. Es muy probable que los mejores datos económicos que empiezan a aparecer, hayan beneficiado a la fuerza política de la gaviota, aunque la losa de la corrupción que tiene encima necesitaría casi de un milagro, para ser compensada con buenos números.
El PSOE, es el que más ha crecido, dentro de esta categoría de históricos, actualmente algo más del 22% de los españoles le votarían, lo que hace que haya mejorado ligeramente con respecto al mes anterior en un 1,52%, acercándose a las mejores cifras que ha presentado desde la contienda electoral europea que fueron del 24,28%.
IU, parece que empieza a recoger, tras las pérdidas importantes que tuvo en favor de PODEMOS, tanto de votantes, como de militantes e incluso dirigentes. El partido de Garzón, ahora mismo cuenta con el favor del 4,70% de los españoles, aunque recordemos que en este último año, llegó a tener un 6,55% de intención de voto.
Hemos dejado para el último, el que sin lugar a dudas está siendo el partido revelación y el que mayor crecimiento está experimentando a todos los niveles. Ciudadanos está en la cresta de la ola, y en este mes ha subido en intención de voto más de un 5%, situándose ahora mismo en el 15,08% (a tres puntos de PODEMOS), y habiendo crecido en intención de voto, desde las elecciones de junio casi un 12%.
“En política, lo importante no es tener razón, sino que se la den a uno” – Konrad Adenauer
Han pasado las elecciones andaluzas, el primer gran round al que se enfrentaban las diferentes fuerzas políticas en este año electoral, por antonomasia. Las encuestas pasaban a un segundo plano, y era la ciudadanía quién realmente se manifestaba, y no bajo el anonimato de dar una opinión por teléfono, o en la calle, a personas desconocidas. Era el momento de ser consecuente, de ir a los colegios electorales, de coger una papeleta, pensando en la persona (marca personal) que se prefería para dirigir los designios de la autonomía con mayor nivel de paro, y con unos índices económicos de los más bajos. O si no en la persona, en el partido (marca política) que entendíamos que mejor podría defender los derechos de andaluces y andaluzas y sobre todo, hacer a esta Comunidad Autónoma dar el definitivo salto al siglo XXI. Mucha era la expectación, muchas las elucubraciones que se habían hecho, pero ahora ya sí que tenemos resultados. Y la pregunta que cabe hacerse después del 22M andaluz, es sin lugar a dudas, ¿qué nos ha enseñado Andalucía?
Varias eran las cuestiones que tenía que desvelar este proceso electoral. La primera de ellas, era conocer el destino del bipartidismo en España, ¿ha muerto o sigue vivo? Viendo los resultados, y viendo cómo han entrado nuevas fuerzas políticas en el Parlamento Andaluz podríamos pensar que se ha vencido al “rancio bipartidismo español PP-PSOE”, pero pensar esto hoy por hoy, sería engañarnos. Y ¿por qué? Sencillamente porque los número hablan por sí solos. ¡Cómo podemos decir que el bipartidismo se ha roto, cuando estas dos fuerzas políticas han sido votadas por algo más del 62 por ciento del total de andaluces y andaluzas? El bipartidismo en la comunidad autónoma blanquiverde no se ha roto, sencillamente va a tener un parlamento más acorde a la imagen de los parlamentos, sobre todo de las comunidades históricas (entre las que se cuenta) y de las de mayor tamaño, en el que hay varias fuerzas políticas con representación, aunque en el caso de Andalucía, ninguna sea autonómica. Es cierto que el bipartidismo ha retrocedido, pero retroceder es una cuestión muy diferente a desaparecer. Nuevos procesos electorales tendrán que ir mostrándonos si realmente es tendencia el retroceso, o se convierte en el fruto de un momento histórico (político, económico y social) determinado.
La segunda cuestión importante a analizar es sin lugar a dudas ¿quién ha ganado las elecciones? Evidentemente, si nos vamos a los datos, las ha ganado el PSOE, pero la pregunta tiene un calado mayor. Realmente qué lectura se puede hacer de estos resultados. En primer lugar vayamos a los vencedores. Susana Díaz es la clara vencedora de las elecciones, y hablo de ella con nombre y apellidos, porque aunque respaldada por la marca política (PSOE), que tiene el peso que tiene en Andalucía, ha conseguido imponer su marca personal, y pasar de advenediza a presidenta electa. El trabajo que ha desarrollado esta mujer, para ganar las elecciones en un momento de marejada como el que se está viviendo, nos muestra mucho de los que la “politología” y el mundo de los asesores políticos puede hacer. Sin entrar en ningún tipo de valoraciones, esta mujer, que además es mujer, lo que nos debe hacer pensar que la cuestión de género, al fin se ha superado en Andalucía, ha conseguido hacer que andaluces y andaluzas, se olviden de los ERE´s, de Mercasevilla, de los escándalos de la formación, y que vuelvan a confiar en ella, y en su fuerza política, que además, no olvidemos, lleva dirigiendo el destino de Andalucía desde 1981. Jamás ha habido un cambio de gobierno. Tan sólo en algunas legislaturas (dos concretamente) ha necesitado coaliciones para gobernar, primero fue el Partido Andalucista, que desapareció prácticamente después de esta aventura conjunta, y en esta última legislatura IU, que parece haber pagado caro también este matrimonio de conveniencia.
Pero además del PSOE y Susana Díaz, ha habido otro claro vencedor en Andalucía, y este aunque pareciera que fuera PODEMOS, no, no lo es. En este caso el otro ganador es Ciudadanos, y curiosamente Albert Ribera, aunque no fuera candidato en Andalucía, ha visto cómo su figura salía reforzada. El partido que lidera este joven catalán, ha obtenido finalmente 9 parlamentarios, superando las expectativas de prácticamente todas las encuestas y convirtiéndose en una opción seria a tener en cuenta en los próximos procesos electorales. El naranja parece que ha conseguido finalmente hacerse un importante hueco en el panorama político español, saliendo de su bastión catalán.
Y si nos vamos ahora al otro extremo, los perdedores claramente han sido PP e IU. El descalabro electoral de los populares ha sido monumental, pareciendo que las nuevas fuerzas políticas emergentes casi que se hayan nutrido para conseguir su respaldo de aquellos que en otro momento votaron a este partido que representa al centro derecha español. Los populares han gestionado mal tanto la marca política (el desgaste de las políticas nacionales de austeridad y ajuste desarrolladas por el gobierno de Rajoy, que han incidido especialmente en Andalucía) así como la marca personal, Juanma Moreno, (un candidato muy desconocido, sin presencia mediática importante, y sobre todo con un nivel de notoriedad bajísimo) no han podido con la marca Susana Díaz, omnipresente en el último año sobre todo. El PP que fue el ganador de las pasadas elecciones, en 2012, ha perdido casi el 14 por ciento del electorado, lo que le ha supuesto perder 17 parlamentarios. Toque de atención muy serio, por mucho que desde Génova se quiera hacer ver que no es para nada, extrapolable el proceso electoral andaluz a los próximos que tenemos por delante. Izquierda Unida, ha sido el otro gran perdedor. Ha tenido como enemigos por un lado a PODEMOS, y es que no olvidemos que esta fuerza política se ha nutrido de muchos integrantes de esta formación; y por otro lado, su alianza de gobierno con el PSOE, del que fue “expulsado” para convocar así este proceso electoral. El tira y afloja final con el PSOE ha tenido consecuencias muy negativas para esta formación política, a la que parece que sus electores no le han perdonado el que no hayan “hecho nada más ante los escándalos de corrupción”. UPyD también es otro perdedor. Esta formación política no ha pedido parlamentarios, porque no los tenía. Ha perdido el 40 por ciento de sus votos, y sobre todo, se ha diluido en un momento que les era propicio, ya que ha sido la primera vez que “otras opciones” han entrado en el parlamento andaluz. No han sabido conectar con la ciudadanía en el momento en el que probablemente el caldo de cultivo estaba ahí. También el rosa magenta, tendrá que analizar muy mucho lo que ha pasado en Andalucía y tomar nota ante próximos procesos electorales.
Finalmente está PODEMOS. Está claro que los resultados de esta formación política son un éxito, ya que se consolida como tercera fuerza en Andalucía, y consigue en su primera comparecencia autonómica convencer a casi el 15 por ciento del electorado. Pero no es menos cierto que todos los augurios en forma de sondeos, eran mucho más benévolos con los “morados”.
Fuere como fuere, cada marca debe de sacar sus propias conclusiones y sobre todo, si se quiere mejorar, hacerlo desde un punto de la autocrítica y no desde la autocomplacencia o queriendo encontrar la “culpabilidad” fuera.